20 de diciembre de 2011

INSPÍRATE!


Pues eso me dijo Esther. Tal cual. "¿Qué hago?" le dije. Me contestó: "Inspírate y hazme algo rápido, no te lo pienses". Y salió esto. Rápido fue... así que constaté que no había perdido mano del todo.

Y para acabar de ponermelo difícil, me dijo que debía pintarlo con las tintas chinas en barra. Sí, esas, que no había tocado en mi vida... Un lote de 5 colores, no puros, de los cuales uno era un blanco inservible (entonces contamos 4: verde, amarillo, azul y rojo).

Para los no iniciados, nadie me dijo que la piedra para restregar las barras y disolver el color perdía negro, lo cual me complicó un poco la existencia. Después de "fregar" varias veces, los colores me salieron más limpios. Es la primera vez que uso esta técnica, con estos materiales.

La tinta china tiene un comportamiento similar a la acuarela, si bien me da la impresión que los colores son más brillantes, y que, una vez seca es muy difícil corregirla, pues no se disuelve con nada. La única posibilidad de eliminarla es rascarla del papel, aunque esto (de momento) se me da francamente mal. Es una lástima que no haya más variedad de colores de estas tintas, aunque por lo que he leído, la pintura china es bastante sobria.

Esther, mi profesora, se está engrescando con la filosofía de estas técnicas. Poco conocidas (al menos aquí), pero con un componente emocional muy fuerte hacia la obra. Si fuera purista, la pintura china no debería ser una representación de la realidad, sino una búsqueda hacia lo más simple, hacia el ánima del objeto representado. 

Obviamente, en esta ocasión, Esther solamente pretendía que probara las barras con cualquier dibujo que se me ocurriera, punto pelota.

Pues bien. este es el resultado. ¡Espero que os guste!

7 de diciembre de 2011

MÁS EJERCICIOS

Continuamos con los ejercicios de bodegones:


Lo bueno es que como soy "buena estudiante", ya me han dejado pasar a los pinceles. He ahí el mismo bodegón con tintas chinas:


¿Cuál os gusta más?

Se nota que descuidé el pequeño bol la segunda vez... pero es que ya es un logro que haga una misma cosa 2 veces (algo que me aburre soberanamente).

Hacía unos 3 años y pico que no pintaba con pincel, y nunca había pintado algo solamente a tinta china (esta técnica la reservaba para corregir errores y delimitar los dibujos a plumilla). Admito que estaba nerviosa e incluso con algo de miedo... Pero bueno, ¡todo es empezar!